miércoles, 19 de febrero de 2014

Empatía

Últimamente me estoy dando cuenta de que el mundo se divide con bastante facilidad en dos tipos de personas según un único criterio, y es el de la empatía. Para no darle muchas vueltas ni entrar en definiciones académicas, lo diré con mis propias palabras. La empatía es la capacidad que tienen (tenemos, me gusta pensar... )algunas personas de ponerse en el lugar del otro, intentar sentir lo que siente otro en determinadas situaciones.

Según esta definición, no se de qué nos asustamos cuando escuchamos las declaraciones de ciertos personajes públicos, sean políticos o miembros del clero, pues está bastante claro que para ellos no existe la empatía, pero no porque no la conozcan, sino porque no les sale de la real gana ponerla en práctica en algunos casos.

¿Alguien piensa que un obispo se ha puesto en la piel de una mujer violada cuando dice tan pinturero que ya que ha sido víctima, lo que no puede hacer es provocar una víctima más abortando? ¿Creeis que ese hombre ha sido capaz de pensar por un momento en lo que sentirá esa mujer gestando y luego dando a luz a una criatura que le recordará continuamente lo que le pasó? No, ni por un momento. Y cómo seguramente se le habrá ocurrido a ese personaje, dar al niño en adopción no soluciona el problema para nada.

En la misma línea de pensamiento podemos afirmar que ningún político de los actuales es capaz de ponerse en el lugar de las personas que lo han perdido todo, o que las están pasando muy putas para salir adelante, cuando les dicen tan alegremente que las cosas están mejorando (y como ya dije en otra ocasión, sin hacer nada! Es el mejor truco desde lo de los panes y los peces!), que lo peor ya ha pasado, que pronto habrá trabajo como churros y que vale ya de protestar, que queda feo en los noticiarios alemanes, y luego tienen que aguantar las miraditas de la Merkel cuando van de chupipandi a Bruselas o a Estrasburgo...que vergüenza!!

Pero los que estoy segura de que carecen absolutamente de eso llamado empatía son esos que salen en las noticias hablando de la tragedia de la inmigración ilegal como quien habla de lo molestos que son los mosquitos en verano, a ver si este año compramos un insecticida mejor, colega, o ponemos más cuchillas, o electrificamos las playas, que los negritos siguen llegando y tienen la mala idea de morirse cuando intentamos que no nos manchen la arena, y, amigo, eso sí que queda mal en los telediarios alemanes y la tita Ángela tiene un disgusto que no veas.

La empatía...ese intangible que hace que la persona que la tiene llore de indignación con los puños apretados cada vez que ve las noticias, o que maldiga para sus adentros cuando se entera que otro de esos políticos que se supone que van a sacarnos de la mierda se ha dedicado a almacenar como una hormiguita su buen dinero, pero eso sí, en Suiza, que aquí no te puedes fiar ni de los bancos.

Ese mismo intangible que hace que la persona que no la tiene no de la cara por todas las marranadas que se están descubriendo dentro de su partido, que no se ponga ni colorado cuando dice que los sueldos no bajan, sino que suben, que legisla según lo que le digan desde un lugar que está a miles de kilómetros del pais que dicen amar y por el que están dispuestos a sacrificarse, recortar todo lo recortable y después sentarse en su despacho con una sonrisa floja y pensar lo bien que lo están haciendo mientras preparan el viaje a la enésima cumbre europea para...para...eshtoooooo...bueno...ya me lo eshplicarán cuando llegue, despuésh de darme las palmaditash en la eshpalda y antesh de entregarme la carpetita con losh shiguientesh colectivosh a losh que tenga que vapulear...


1 comentario:

  1. Afortunadamente las personas de corazón noble como tu, de mirada certera, de los que viven el día a día con todas sus consecuencias, alegrías y dolores no mira las cosas con las anteojeras de estos ganapanes. Sigue adelante!

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